El motor de Antoine Griezmann no tiene nada que ver con el fútbol
El Metropolitano está rendido a Antoine Griezmann del mismo modo que él demostró sobre el césped del estadio del Atlético de Madrid estar entregado a su jugador fetiche. El conjunto capitalino disputó el último partido de liga en su feudo hasta la próxima temporada y toda la atención fue a parar hacia la figura de su número 8, que ya habrán averiguado de quién se trata.
Griezmann fue-una vez más- el mejor jugador del encuentro al anotar un gol y asistir en otro. Durante todo este año, el talentoso jugador francés ha brillado con luz propia por la calidad que atesora en sus botas. Al público le duelen las manos de aplaudirle en cada jugada. Sin embargo, uno de los momentos más emotivos se vio al finalizar el encuentro que enfrentó al Atleti con la Real Sociedad.
Antoine Griezmann y sus hijos / Gtres
Una parte de la afición coreaba su nombre y el jugador no dudó en saltar al campo de nuevo para agradecer los ánimos. Lo extraordinario fue que lo hizo junto a una compañía de lo más especial, sus tres adorables hijos. Todo el estadio coreaba su nombre y Griezmann intentaba que sus pequeños devolvieran el cariño saludando, pero estos mostraron una gran timidez.
Antoine Griezmann y sus hijos / Gtres
La pieza que sostiene la vida de Griezmann
Nada de lo anterior sería posible si en la vida de Antoine Griezmann no se hubiera cruzado una mujer que responde al nombre de Erika Choperena. Originaria de San Sebastián y fundadora de una marca de ropa para los más pequeños, ella es el motor en la vida del futbolista. La pareja se conoció cuando eran jóvenes y estudiaban en la misma escuela. A pesar de que Erika no es una figura pública, su relación con el jugador ha sido muy comentada por los medios y los fans.
Erika y Antoine contrajeron matrimonio en 2017 en una ceremonia celebrada en el Palacio de Galiana, un edificio mudéjar del siglo XI, situado a orillas del Tajo y con unas vistas incomparables de Toledo, rodeados de familiares y amigos cercanos. Desde entonces, han formado una familia con tres hijos: Mia, de 7 años, Amaro, de 4 y Alba, de 2. Como curiosidad hay que destacar que todos ellos han nacido el mismo día: 8 de abril.
Ver esta publicación en Instagram
A pesar de que Erika prefiere mantenerse alejada de los focos, ha sido vista en numerosas ocasiones acompañando a su esposo a eventos deportivos y sociales. Además, ha sido muy activa en las redes sociales, compartiendo fotos y momentos familiares con sus seguidores. El matrimonio ha demostrado solidez y se ha apoyado mutuamente en todo momento. En una entrevista, Antoine mencionó que Erika es su mejor amiga y que siempre está a su lado en las buenas y en las malas.
Así las cosas, gran parte del éxito de Griezmann se lo debe a la paz y el amor que le brinda Erika Choperena, una mujer discreta pero muy importante en la vida de Antoine. Su amor y apoyo han sido fundamentales para el éxito del futbolista francés tanto en su carrera como en su vida personal.